Según el investigador Debby Herbenick, co-director del Centro para la Promoción de la Salud Sexual en la Universidad de Indiana, los resultados añaden datos cualitativos y cuantitativos en un campo que ha sido poco estudiado. Alfred Kinsey y sus colegas describieron este fenómeno por primera vez en 1953, cuando descubrieron que alrededor del 5 por ciento de las mujeres a las que se había entrevistado mencionaban el orgasmo ligado con el ejercicio físico. Sin embargo, no pudieron conocer la prevalencia real porque la mayoría de estas mujeres dieron esta información sin que se les preguntara directamente.

Desde entonces, los informes de los llamados "nucleorgasmos", llamada así debido a su relación aparente con los ejercicios para los músculos abdominales, han circulado en los medios de comunicación durante años.

"A pesar de la atención en los medios populares, poco se sabe científicamente sobre los orgasmos inducidos por el ejercicio", afirman los investigadores en un número especial de la revista Terapia Sexual y de Pareja publicado en versión impresa de este mes.

Placer en el gimnasio

Herbenick y sus colegas utilizaron encuestas "online" para recoger sus datos, incluyendo respuestas de 124 mujeres que habían experimentado orgasmos inducidos por el ejercicio y 246 mujeres que informaron de placer sexual inducido por el ejercicio. La mayoría de mujeres participantes tenían entre 18 a 63 años, tenían una relación o estaban casadas y el 69 por ciento eran heterosexuales.

Los investigadores encontraron que alrededor del 40 por ciento de ambos grupos de mujeres, habían experimentado placer u orgasmo inducido por el ejercicio  en más de 11 ocasiones en su vida. La mayoría de las mujeres del grupo que había experimentado un "orgasmo"  dijeron que sentían un cierto nivel de incomodidad al hacer ejercicio en lugares públicos.

La mujeres que habían experimentado un "orgasmo", afirmaron que cuando sucedió no estaban teniendo una fantasía sexual o pensando en alguien por quien se sintiesen atraídas.

Los abdominales son los mejores

La investigación reveló que los orgasmos tienden a ocurrir después de varias series de abdominales o algún otro ejercicio abdominal, en lugar de después de solo un par de repeticiones.

"Hemos tenido al menos una mujer en el estudio que era virgen, y que estaba encantada de poder disfrutar de estas experiencias en el gimnasio", dijo Herbenick.

Los investigadores no están seguros de por qué ciertos ejercicios inducen el orgasmo o placer sexual, aunque Herbenick espera desentrañar el desencadenante a lo largo de su de su trabajo.

La investigación presenta distintas implicaciones respecto a la sexualidad de las mujeres. Por un lado, el orgasmo y el deseo sexual ha encabezado, desde siempre, la lista de preocupaciones sexuales de las mujeres, con alrededor de uno de cada cuatro mujeres que no alcanzan el orgasmo durante el sexo.

En segundo lugar, los científicos han debatido durante mucho tiempo el contexto evolutivo del orgasmo femenino y su relación con la sexualidad y la reproducción. Sin embargo, si muchas mujeres experimentan el orgasmo durante el ejercicio no relacionado con el sexo, entonces el orgasmo inducido por el ejercicio puede revelar la relación del sexo con la reproducción.