La nueva droga ha funcionado ya en la lucha contra el cáncer de mama y ofrece esperanza a las personas con cáncer de próstata, piel o intestino.

Esta mata selectivamente las células madre del cáncer que favorecen el crecimiento de los tumores y que ayudan a propagar la enfermedad a través del cuerpo.

A diferencia de otras células cancerosas, las células 'madre' son resistentes a la radioterapia y la quimioterapia, permitiendo que el cáncer vuelva después del tratamiento.

En las pruebas de laboratorio, el nuevo fármaco, salinomicina, era 100 veces más eficaz en la destrucción de las células madre que el poderoso tratamiento de quimioterapia Taxol.

Inyectado en ratones con cáncer de mama, también se frenó el crecimiento de tumores.

Las células madre tratadas con la nueva droga tenían menos capacidad de iniciar tumores en los animales que las células tratadas con Taxol.

Los investigadores creen que docenas de medicamentos con propiedades similares podrían desarrollarse en los próximos años. El tratamiento se encuentra a una década de ser comercializado.

Los nuevos fármacos podrían ser utilizados en combinación con las terapias estándar para limpiar las células madre del cáncer dejadas por el tratamiento tradicional.

Esto reduciría las probabilidades de que el cáncer regresase.

También podrían ser utilizados para detener la propagación de la enfermedad a través del cuerpo. Esta es la causa más común de muerte por cáncer cada año.

Piyush Gupta, del Broad Institute of the Massachusetts Institute of Technology and Harvard, dijo: «No estaba claro si sería posible encontrar compuestos que matasen selectivamente a las células madre del cáncer. Hemos demostrado que se puede hacer.

"Nuestro trabajo, sugiere un enfoque general en la búsqueda de nuevas terapias contra el cáncer que se pueden aplicar a cualquier tumor mantenido por células madre cancerosas.

Inicialmente, los investigadores identificaron una forma de crear grandes cantidades de células madre cancerosas en el laboratorio. Luego, probaron 16.000 productos químicos diferentes en estas células para ver cual resultaba tóxico.

La salinomicina, un antibiótico administrado a animales de granja, fue el claro ganador, también redujo tumores de mama en ratones.

A partir de ahora hay que trabajar duro para averiguar cómo funciona y establecer si será eficaz frente a tumores humanos.