En concreto, se han estudiado productos típicos de este sector, con muestras procedentes de diversas empresas, como son el turrón de Jijona, el turrón de Jijona en textura líquida, el turrón de Alicante y su formato en torta.

El análisis realizado ha demostrado que los productos analizados son "alimentos de buena calidad" en lo que a sus propiedades organolépticas y nutritivas se refiere, ya que contiene una "importante fuente" de proteínas, concretamente un porcentaje destacable de arginina, que juega un papel relevante en la prevención de la patología vascular.

Además, son una "buena fuente" de fitoesteroles, que contribuyen a reducir el grado de absorción del colesterol y podrían ofrecer una protección frente a los tipos más comunes de cáncer como el de colón, mama y próstata.

Por otro lado, destaca el contenido en fibra, "indispensable para la dieta diaria debido a los efectos preventivos de enfermedades gastrointestinales y cardiovasculares".

A su vez, poseen una alta capacidad oxidativa, con actividad protectora frente a la acción lesiva de los radicales libres y presentan, también, un alto contenido en grasa de tipo saludable, que ayuda a prevenir la aparición de enfermedades cardiovasculares, siendo la proporción de ácidos grasos insaturados en torno al 90 por ciento.

El análisis realizado indica que estos productos son alimentos saludables por contener una serie de nutrientes que son capaces de desarrollar efectos positivos sobre la salud humana. El turrón es un alimento que tomado "con moderación, puede formar parte de una dieta equilibrada y saludable que se ajusta a las recomendaciones dietéticas admitidas".

Si bien el estudio demuestra que estos nutrientes que se encuentran en el turrón son saludables, se debe "tener en cuenta que cuando se ingiere un alimento intervienen multitud de factores y por lo tanto hay que ahondar en los estudios clínicos que acrediten el efecto beneficioso de estos alimentos, incluidos en la cantidad adecuada en una dieta equilibrada", según la misma fuente.