Tal y como afimirma en su perfil de Facebook, los enfermos de cáncer son, aparentemente, personas sin "heridas de guerra", pero, "El cáncer no entiende de géneros, raza o edades - continúa y tenemos la responsabilidad de hacer que otros se enteren".

Por este motivo, esta australiana ha iniciado junto a la fotógrafa Nadia Masot el proyecto Under the red dress (Bajo el vestido rojo), con el que buscan concienciar sobre la enfermedad y sus consecuencias y ayudar a prevenirla. "Cada día pasamos junto a otras personas. Individuos que parecen normales, pero los cuerpos que se ocultan debajo de sus ropas cuentan una historia muy distinta", relata Beth Whaanga en su perfil de Facebook.

Ella decidió mostrar lo que ocultaba bajo su propio vestido rojo y posó para Masot como si lo estuviera haciendo para una revista de moda y su valentía le ha costado perder 103 amigos en Facebook. Sin embargo, más tarde volvio a ganar amigos y las fotografías ya han dado la vuelta al mundo como un ejemplo de entereza y valentía en la lucha contra el cáncer.

Aunque su cuerpo no tiene nada que ver con la imagen que transmiten las modelos de las revistas ella reivindica su cuerpo afirmando: "Mis cicatrices no son feas, significan que estoy viva".

La fotografía que publicaron en facebook la podéis ver aquí: https://scontent-b-cdg.xx.fbcdn.net/hphotos-prn1/t1/1001268_631227193593191_760265456_n.jpg